Valorando las características del dolor de espalda, la exploración física, la medición de la fuerza y movilidad en los dispositivos David y el estudio de las pruebas radiológicas, podemos determinar la situación clínica del paciente y proponer el mejor protocolo de tratamiento
En septiembre de 2015 comencé a sufrir dolor ciático en el glúteo y la pierna derecha. El dolor se fue intensificando de modo que no podía hacer deporte y a veces ni caminar. Tras visitar a mi médico de cabecera, tres fisioterapeutas, un quiromasajista y dos osteópatas, finalmente en diciembre tuve que acudir a urgencias y cambié de médico. Me diagnosticaron dos protrusiones en L4-L5, estuve de baja 5 meses y acudí durante 3 a rehabilitación a la mutua. En julio de 2016, viendo que empeoraba de nuevo, acudí a Medspine por probar algo nuevo. Calculo que en un mes ya estaba recuperada. Dejé de cojear y recuperé mi vida activa habitual. En mi caso, un éxito. Gracias.