Es necesario descartar la presencia del síndrome del piramidal para evitar la realización de procedimientos agresivos e innecesarios en la columna.
El dolor lumbar crónico o lumbalgia es una entidad patológica frecuente que aparece de forma insidiosa o brusca y que se prolonga durante meses o años sin remisión o con periodos de mejoría y recaída alternantes. Puede manifestarse con alguno de los siguientes síntomas:
– Problemas de movilidad que pueden llegar a impedir que el paciente camine o se ponga de pie.
– Dolor que se irradia por la pierna y pasa por la ingle, gluteo o parte superior del muslo.
– Espasmos musculares.
-Área localizada que es dolorosa con la exploración.
En esta sección se agrupan las informaciones relacionadas con el dolor lumbar o lumbalgia, tratamiento del dolor lumbar crónico y síntomas en que se manifiesta.
Es necesario descartar la presencia del síndrome del piramidal para evitar la realización de procedimientos agresivos e innecesarios en la columna.
Determinar el nivel de incapacidad que provoca el dolor lumbar resulta imprescindible para el pronostico y el tratamiento. Con la Escala de incapacidad de Owestry lo sabrás en 5 minutos.
Los astronautas tienen mayor riesgo de padecer hernia discal, debido a largos períodos en ausencia de gravedad. El estudio de sus riesgos ayuda a la prevención para la población en general.
Actualmente el dolor lumbar es la principal causa de discapacidad en el planeta, por lo que en cierta manera podemos hablar de una ‘epidemia’ mundial de dolor lumbar.
El dolor de espalda es resultado de una compleja interacción entre factores estructurales, ambientales y psicosociales. Sin embargo la predisposición genética también influirá de forma parcial en el riesgo de padecer esta condición.
La experiencia nos muestra que ciertas situaciones estresantes provocan un estímulo capaz de suprimir el dolor. Por ejemplo: se han descrito casos de soldados gravemente heridos en batalla que afirmaron no sentir dolor o deportistas que continúan haciendo ejercicio a pesar de lesiones graves y que referían no haber sentido dolor. Todo ello apunta a […]
La recurrencia de los episodios de dolor lumbar es algo muy frecuente y puede conducir a la cronificación del dolor. Hacer ejercicio es la intervención más consistente.
El principal problema de estar sentado de forma prolongada reside en el mantenimiento de una determinada postura durante mucho tiempo. El uso del fitball puede ser interesante durante periodos cortos de tiempo y alternándolo con la silla habitual.
La dismetría de las piernas se considera un factor de riesgo para el dolor lumbar. Puede causar un mayor estrés biomecánico en la columna lumbar que provoque dolor.
La realización de tareas tan rutinarias como atarse los zapatos o cepillarse los dientes pueden suponer, a primera hora del día, un mayor estrés sobre las columna. Cuida la postura en estas actividades para mejorar y reducir tu dolor lumbar.