Como ya hemos comentado en múltiples ocasiones la adecuada resistencia de los músculos del tronco es esencial en el mantenimiento de la salud de nuestra espalda. Los diferentes movimientos del tronco (flexión, extensión, lateralización y rotación) deben ser controlados de forma eficaz por una musculatura que sea capaz de mantener una adecuada resistencia muscular en los diferentes planos.
Movimientos del tronco
Hay que recordar que los distintos músculos encargados de otorgar estabilidad a la columna vertebral trabajan de forma conjunta. Por tanto, una adecuada coordinación y equilibrio muscular del tronco también será un factor determinante de la salud de nuestra espalda. De hecho, se ha venido demostrando que los desequilibrios entre diferentes grupos musculares (por ejemplo desequilibrios entre la fuerza de flexión y extensión de tronco) proporcionan un fuerte pronostico del riesgo de futuros problemas de espalda.
¿Tengo que mejorar mi equilibrio muscular del tronco?
Nuestro cuerpo es como una balanza que debe estar correctamente nivelada. Pero ¿cuál es el equilibrio correcto? Diversos estudios han recogido datos para determinar cuándo la resistencia y el equilibrio muscular del tronco comienzan a ser un riesgo.
Por una parte, se ha observado que una asimetría mayor del 5% entre la fuerza muscular de la musculatura encargada de la lateralización del tronco se considera disfuncional.
Otro desequilibrio común en la población general es el que involucra a la musculatura flexora y la extensora (abdominal – lumbar). Por nuestros hábitos y estilo de vida la fuerza de la musculatura extensora (lumbar) se encuentra generalmente disminuida en relación a la musculatura flexora (abdominal) en personas con problemas de espalda.
En nuestro día a día en la clínica, es habitual encontrar en pacientes con dolor de espalda ratios de extensión-flexión que muestran una predominancia de la musculatura flexora así como desequilibrios en lateralización y rotación.
En resumen, la fuerza de la musculatura y también la resistencia en los diferentes planos de movimiento del tronco son indispensables para el mantenimiento de la estabilidad de la columna durante cualquier tarea. Cuando esta disminuye y se producen los desequilibrios, los problemas de espalda no tardan mucho en comenzar. Por tanto, se hace necesaria una correcta evaluación que sea capaz de determinar los déficits de fuerza y los desequilibrios para poder elaborar un adecuado programa de ejercicio que mejore la fuerza, la resistencia muscular y la equilibrio en todos los planos.
